El Ayuntamiento apoya la decisión del Obispado de suspender la LXIX Bajada de la Virgen |
El gobierno local defiende que las Fiestas Lustrales sean un revulsivo económico cuando existan garantías sanitarias
El Grupo de Gobierno (PP-CC) en el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma ha mostrado su apoyo firme a la decisión del Obispado de la Diócesis de Tenerife de suspender la celebración de la LXIX Bajada de la Virgen de las Nieves en los meses previstos de 2020 por los efectos del Covid 19, una comunicación eclesiástica que se ha hecho de forma coordinada con la institución municipal y el Cabildo palmero.
El gobierno local ha informado de que “el Obispado trasladó su decisión al alcalde y presidente del Organismo Autónomo de la Bajada de la Virgen, Juan José Cabrera, que expresó su conformidad con los criterios expuestos por la Iglesia, al coincidir plenamente con el sentir del Ayuntamiento sobre la conveniencia de suspender los actos en un momento en el que la lucha contra la pandemia para salvar vidas es el único objetivo prioritario”.
El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, a través del concejal coordinador de las Fiestas Lustrales, Tony Acosta, tomó la decisión hace ya meses, incluso antes de que fuera una obligación, de cerrar la sede del Organismo Autónomo de la Bajada de la Virgen 2020, trasladando su personal a tareas municipales, además de suspender la totalidad de los ensayos de los diferentes actos tradicionales que estaban previstos desarrollar este verano en honor de la Patrona y frenar las negociaciones abiertas para la contratación de artistas e infraestructuras necesarias para los eventos de ocio.
El Grupo de Gobierno ha defendido también la decisión del Obispado sobre la posibilidad de celebrar la Bajada de la Virgen en una fecha extraordinaria, siempre con las garantías de las Autoridades Sanitarias. En este sentido, se defiende que “las Fiestas Lustrales pueden y deben convertirse en el motor económico más importante para la economía no solo de nuestra ciudad sino de toda la Isla después de que se supere la pandemia”. Y es que “cuando el virus esté bajo control, la crisis económica a la que se tendrán que enfrentar nuestras pequeñas y medianas empresas será desgraciadamente de tal magnitud, con tantos puestos de trabajo en juego, que se necesitará de un revulsivo de notable calado para salir adelante”.
El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma ha dejado claro que la suspensión de la Bajada de la Virgen “no altera la labor diaria que estaba desarrollando el grupo de gobierno y los trabajadores municipales, que llevan durante las últimas semanas, meses incluso, afrontando la crisis sanitaria y económica por el coronavirus con todo el esfuerzo posible para que ninguna familia se quede por el camino y todos podamos salir juntos de esta grave situación”.
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